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¿Cómo evitar que tu gato destruya el árbol de Navidad? El secreto de un adiestrador experto

2025/12/06 01:42

Entre luces y adornos, la temporada navideña representa todo un reto para los amantes de los gatos, pues estas mascotas suelen actuar de forma incontrolable ante los objetos brillantes que penden del árbol de Navidad y otras decoraciones alusivas a la época.

El instinto felino se hace presente en los hogares que, año con año deciden colocar decoraciones llamativas con la esperanza de que su minino no se acerque o decida saltar para embestir la punta del pino arriesgando su bienestar.

Si en tu hogar también se vive esta problemática, el experto en bienestar animal José María Zamora, mejor conocido en redes sociales como “Chemanimals” compartió un eficaz truco para mantener a tu mascota alejada del árbol de Navidad.

Qué hacer para que los gatos no destruyan el Árbol de Navidad

“Chemanimals” es un veterinario originario de Culiacán, Sinaloa, que se posicionó como uno de los expertos del cuidado animal más vistos en Latinoamérica, con más de 10 millones de seguidores en TikTok por su amplio conocimiento en todo tipo de fauna.

Durante la temporada navideña, donde miles de familias realizan preparativos para las festividades, el experto compartió un sencillo truco para alejar a los gatos del árbol de Navidad, se trata de un repelente casero.

Para su preparación solo necesitas colocar los siguientes ingredientes en una botella con atomizador, dejar reposar mínimo durante dos horas y rociarlo por todo tu árbol de Navidad.

Ingredientes:

  • 4 cucharadas de hojas de menta seca y triturada
  • Cáscara de toronja
  • El jugo de un limón entero
  • Un chorrito de limpiador con aroma de pino

Otros consejos para proteger tu árbol de Navidad de las mascotas

  • Elige un lugar estratégico: La ubicación es clave, evita colocar el árbol cerca de muebles, repisas o superficies por las que tu gato pueda saltar directamente hacia él. Lo ideal es ubicarlo en un rincón despejado, dificultando que el felino lo escale o derribe.
  • Estabiliza la base: Asegúrate de que el árbol esté bien sujeto utilizando bases pesadas o anclajes que eviten que se incline o caiga si el gato brinca o juega cerca. Este pequeño detalle evitará accidentes y posibles daños.
  • Decora de forma inteligente: Opta por adornos resistentes y evita colgar piezas delicadas o pequeñas en ramas bajas, ya que los gatos suelen jugar con ellas. Coloca lo más atractivo fuera de su alcance y evita guirnaldas que se muevan demasiado, ya que pueden incentivar el juego.
  • Protege luces y cables: Los gatos pueden morder cables o enredarse en ellos. Utiliza fundas protectoras, cinta adhesiva o cubiertas de plástico transparente para mantenerlos seguros.

Por Dann Silva

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¿Sabes qué es la listeriosis? Bacteria que puede vivir en tu refrigerador

¿Sabes qué es la listeriosis? Bacteria que puede vivir en tu refrigerador

Jessica Zamora RamirezEl refrigerador suele ser sinónimo de seguridad alimentaria, pero hay una bacteria que no respeta esa regla. La listeria puede seguir viva en el frío y, en ciertos casos, provocar una infección que va más allá de un simple malestar estomacal.  Por eso, cuando se habla de listeriosis, no se trata de alarmar, sino de entender qué señales hay que tomar en serio y qué hábitos cotidianos ayudan a prevenirla. ¿Qué es la listeriosis? La listeriosis es una infección causada por la bacteria Listeria monocytogenes y se adquiere casi siempre al comer alimentos contaminados. No es una enfermedad común, pero sí está entre las infecciones alimentarias más peligrosas cuando ocurre.  La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que su incidencia oscila entre 0.1 y 10 casos por millón de habitantes al año, dependiendo del país y la región. Aunque el número de casos es bajo, la OMS subraya que la listeriosis preocupa porque puede ser mortal y produce complicaciones severas en ciertos grupos. A diferencia de un malestar estomacal que se queda “en la barriga”, la listeria puede ir mucho más lejos. En personas vulnerables, la bacteria puede pasar a la sangre y al sistema nervioso, provocando infecciones llamadas “invasivas”, como septicemia (infección general) o meningitis (infección de las membranas del cerebro).  Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades recuerdan que, aunque es rara, la listeriosis está entre las principales causas de hospitalización por enfermedades transmitidas por comida en varios países, justamente por su capacidad de volverse grave.  Cómo se contagia y cómo sobrevive y crece en el frío La bacteria se transmite sobre todo por alimentos listos para comer que se contaminan durante la producción, el transporte o el manejo en cocina, indican los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). Lo que vuelve tan particular a la listeria es que puede sobrevivir y multiplicarse a temperaturas de refrigeración. Mientras muchas bacterias se frenan en frío, Listeria monocytogenes no solo resiste, sino que puede crecer lentamente dentro del refri. La OMS y el CDC remarcan esta característica, razón por la que a veces se le llama “la bacteria del refrigerador”. Esto explica por qué los brotes suelen vincularse con alimentos que se guardan fríos y se consumen sin cocinar, como: Carnes frías, embutidos y productos de deli Quesos suaves o frescos, sobre todo si no están pasteurizados Ensaladas preparadas y comida lista para comer refrigerada Pescados ahumados refrigerados o patés fríos Síntomas de la listeriosis Los síntomas dependen de quién se infecta y de qué tanto avance la bacteria dentro del cuerpo. El CDC distingue dos formas principales:  1. Listeriosis no invasiva (gastrointestinal) Es la más común en personas sanas. Puede causar fiebre, diarrea, náusea, vómito y dolor muscular, como una “gastroenteritis fuerte”. Muchas veces se resuelve sola, aunque puede ser muy molesta y durar varios días. 2. Listeriosis invasiva Ocurre cuando la bacteria entra al torrente sanguíneo o al sistema nervioso. Aquí aparecen síntomas más preocupantes: fiebre alta persistente, confusión, rigidez de cuello, pérdida de equilibrio o convulsiones. Esta forma es la peligrosa y requiere hospitalización y antibióticos. No siempre empieza con señales espectaculares. En personas vulnerables puede iniciar como un cuadro leve tipo gripe o diarrea y complicarse después. Población de mayor riesgo Listeria puede ser leve en una persona sana, pero muy grave en ciertos grupos. El CDC los identifica con claridad: embarazadas, recién nacidos, adultos mayores de 65 años y personas con defensas bajas. - Embarazadas Durante la gestación baja de forma natural una parte de la inmunidad celular para permitir el desarrollo del bebé. Ese cambio fisiológico facilita algunas infecciones. Una revisión de Current Treatment Options in Infectious Diseases explica que las embarazadas pueden ser entre 13 y hasta 100 veces más susceptibles a la listeriosis que otras personas. Lo delicado es que la enfermedad puede sentirse “leve” en la mamá —a veces solo fiebre, cansancio y dolor muscular—, pero alcanzar la placenta y al bebé. El CDC señala que la listeriosis durante el embarazo puede provocar aborto espontáneo, muerte fetal, parto prematuro o infección grave en el recién nacido, incluso si la madre no se siente tan enferma. Un estudio de la revista Microorganisms encontró asociación entre listeriosis y desenlaces adversos perinatales, incluyendo parto prematuro, infección neonatal y bajo puntaje Apgar, sobre todo cuando la infección ocurre temprano en el embarazo.  Adultos mayores e inmunodeprimidos En mayores de 65 años y en personas con enfermedades o tratamientos que bajan defensas (cáncer, VIH, trasplantes, uso prolongado de esteroides o fármacos inmunosupresores), la bacteria tiene más probabilidad de convertirse en invasiva. Por eso estos grupos presentan más casos de meningitis o septicemia por listeria y requieren atención médica inmediata. Cómo prevenir la listeria en casa (sin paranoia) La prevención es muy parecida a la de otras enfermedades por alimentos, con un par de énfasis clave porque Listeria aguanta el frío. CDC y OMS recomiendan: Evitar lácteos no pasteurizados, especialmente en embarazo, adultos mayores o personas inmunodeprimidas. Revisa siempre la etiqueta. Consumir carnes frías y productos de deli pronto. Si perteneces a grupo vulnerable, mejor calentarlos hasta que estén humeantes antes de comerlos. Lavar frutas y verduras incluso si se van a pelar, porque la contaminación puede estar en la superficie. Separar crudos y cocidos en tabla, cuchillos y recipientes. No uses los mismos utensilios sin lavar. Mantener el refrigerador limpio y a temperatura adecuada. Si se derraman jugos de carne o alimentos, límpialos de inmediato. Estar atento a alertas sanitarias: la listeria suele detectarse en brotes específicos y las autoridades retiran productos cuando hay riesgo. El objetivo no es vivir con miedo a la comida, sino ser estratégico con los alimentos más delicados. Para la mayoría de personas sanas el riesgo es bajo, pero en grupos vulnerables, estas medidas hacen una diferencia real. La listeriosis es un ejemplo clásico de una enfermedad poco frecuente con alto impacto. Su gravedad no está en cuántos casos haya, sino en que puede volverse invasiva y peligrosa en embarazadas, recién nacidos, adultos mayores o personas con defensas bajas.  Saber que la listeria puede crecer en el refrigerador ayuda a entender por qué las medidas de higiene, la pasteurización y el buen manejo de alimentos importan tanto como la refrigeración. Con información clara y cuidados básicos en casa, el riesgo se reduce al mínimo. Y si perteneces a un grupo vulnerable, la regla es sencilla: mejor prevenir con pequeños cambios que enfrentar una infección que sí puede ser seria. Contenidos Relacionados: ¿Duermes con calcetines? Podrías infectar tu cama con miles de bacterias y hongos¿Rasurarse o usar barba? Un estudio compara cuál de las dos opciones abre la puerta a las bacteriasOjo rojo en bebés: Podría tratarse de conjuntivitis viral o bacteriana, especialistas
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